La arboricultura es la ciencia y el arte de cultivar, mantener y manejar los árboles, y hoy juega un papel fundamental en la lucha contra los desafíos ambientales y climáticos a los que nos enfrentamos. Los árboles son uno de los mayores aliados naturales para combatir el Cambio Climático, debido a una gran cantidad de servicios ecosistémicos que son capaces de proveer.
En las ciudades, el cuidado de los árboles resulta más importante aún, donde el calor y la contaminación pueden tener un impacto negativo en la calidad de vida de las personas. Sin embargo, los árboles también enfrentan sus propios desafíos, como la propagación de enfermedades y plagas, y el daño y mal manejo accidental o intencionado por parte de las comunidades.
Por ello, los arboricultores cumplen un papel crucial en la protección y el cuidado de los árboles para aprovechar todos sus beneficios, y para ello se requiere contar con conocimientos profundos sobre la biología de los árboles, y el estudio de las mejores técnicas de manejo y cuidado durante todo su ciclo de vida.
En resumen, la arboricultura es esencial para preservar y proteger los árboles, que son una parte fundamental del ecosistema terrestre. Al cuidar y fomentar el crecimiento de los árboles, podemos enfrentar los desafíos ambientales y climáticos que enfrenta nuestro planeta, mejorando la calidad de vida de las personas y garantizando un futuro sostenible para las generaciones actuales y futuras.