Acciones de manejo posterior a la plantación de árboles:
Una vez que los árboles han sido plantados o instalados, se recomienda realizar algunas acciones relacionadas con el riego, para garantizar un mayor porcentaje de sobrevivencia de los ejemplares:
- Durante los 3 días posteriores a la plantación de los árboles, se recomienda aplicar un riego profundo hasta saturar (evitando el sobre riego). Para ello, se regarán con abundante agua en la superficie para lograr humedecer el pan de tierra y asentar de mejor forma la tierra de relleno. Para esta acción, basta con dejar que la manguera riegue con lentitud la base del árbol durante unos 5 a 10 minutos.
- Desde el cuarto día hasta que se inicie el período de mantención, el contratista a cargo de la obra deberá regar los árboles 2 veces por semana como mínimo, considerando 3 a 5 litros de agua en épocas de calor moderado, aumentando esa cantidad en casos de calor excesivo, con la finalidad de asegurar el óptimo y rápido establecimiento de las especies arbóreas.
Adicionalmente, se recomienda que a 0,5 m de distancia del fuste de los árboles recién instalados, se hagan dos agujeros de bioporos de 0,7 a 1 m de profundidad con tubos plásticos de 110 mm de diámetro, para facilitar el riego de raíces y fomentar su profundidad. El tercio basal del tubo debe tener rajaduras para permitir la salida del agua. En caso que el agujero de bioporo se utilice sólo con el fin de riego, se recomienda rellenar el tubo de gravas.
Por otra parte, también es recomendable especificar en los proyectos ejecutados con recursos públicos, que sean reemplazados todos aquellos árboles que no se desarrollen o no broten espontáneamente durante los tres meses siguientes a la instalación.