Como primera labor de preparación del suelo, se contempla el retiro de la primera capa de 0,20 m de suelo. Posteriormente, se deberá roturar y harnear todo el terreno a sembrar, a una profundidad de 0,25 m aprovechando de retirar desechos, piedras u otros. En ningún caso ejecutar esta labor con el suelo mojado o encarchado, dado que ello impedirá dejar el terreno suelto.
Muy importante es dejar el terreno lo más aireado posible con el fin de descompactarlo y mejorar el suelo para la posterior incorporación de la tierra vegetal que albergará el césped.
Luego, el terreno se rastrillará para extraer todos los escombros, raíces, palos, elementos tóxicos, piedras de tamaño superior a 0,02 m y todo objeto que pudiera aparecer y que no cumpla con el propósito requerido. Luego se regará con algún tipo de funguicida para desinfectar el suelo, eliminando agentes patógenos.
Importante considerar que los paños de terreno donde se consulte césped deberán considerar una pendiente de bombeo mínima de 2% hacia sus costados, para permitir la adecuada evacuación de aguas lluvias y de riego, y evitar charcos y apozamientos que puedan inducir a la aparición de hongos por pudrición del sistema radicular del césped.
En aquellos espacios donde el proyecto consulte lomajes, se deberá rellenar con suelo natural compactado, suficiente para llegar a las alturas establecidas en planos.
Sobre esta capa de tierra bien rastrillada y nivelada se agregará una capa de 5 cm. de arcilla y luego deberá colocarse una capa de tierra vegetal de 15 cm. de espesor. Esta tierra debe ser una mezcla consistente en:
- 50% de tierra vegetal agrícola
- 30% de compost de buena calidad, maduro y estabilizado, procedente de planta de compostaje con resolución sanitaria.
- 20% de arena gruesa harneada.
Los materiales serán revueltos hasta conformar una mezcla homogénea, esparciéndola sobre la superficie nivelada, libre de impurezas inorgánicas, contaminantes o de componentes tóxico para las plantas. Luego se deberá volver a rastrillar para micronivelar y formar la cama de siembra, incluido un tratamiento y aplicación de fertilizante de entrega lenta (Multigreen siembra 20-24-9) en dosis de 2 kg / 100 m2.
Previo a la siembra se procederá a incorporar el fertilizante con rastrillo, lo que además servirá para dar una última nivelación y eliminar terrones u otros elementos, dejando un terreno mullido. Se deberá también extraer las posibles malezas que emerjan, las que deberán ser eliminadas de raíz y de forma manual.
Junto con el fertilizante, en la capa de tierra vegetal se aplicará producto hidrogel tipo Stockosorb, equivalente técnico o superior, en seco al voleo con un aparato dispersante para lograr una distribución homogénea, o aplicarlo con una sembradora para una aplicación más controlada. Se aplicará en una dosis de 5 kg / 100 m2. El producto debe quedar introducido a una profundidad aproximada de 15 cm, previo a la siembra del césped.